Pujanza Hado 2020 muestra la cara más accesible de la bodega de Laguardia. Tempranillo de viñedos altos (600-720 m) que mezcla cereza jugosa, violetas y un toque de regaliz sobre una fina base mineral. Doce meses en roble francés pulen taninos y aportan un susurro especiado. Fresco, de cuerpo medio y muy bebible: perfecto para barbacoas serias y charlas sin prisa.